Andrew Powell nació el 18 de abril de 1949 en Londres, Inglaterra. Comenzó su vocación musical a la edad de 4 años, tomando lecciones de piano, percusión orquestral, violín y viola. A los 11 años escribió la banda de sonido para un corto en su escuela, al cual describió como 15 minute shorts produced by the film society.
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En Alemania estudió junto Stockhausen y retornó a Inglaterra para obtener el graduado musical en el King's College (Cambridge). Formó parte de un grupo electrónico llamado Intermodulation, quienes fueron pioneros en el uso de sintetizadores electrónicos y que logró la colaboración de artistas como John Cage y el propio Stockhausen.
Andrew trabajó en estudio para artistas del rock como Steve Harley & Cockney Rebel's (1973) donde le presentan al ingeniero de sonido Alan Parsons, de donde nace The Psychomodo, el primer trabajo realizado entre Alan Parsons y Andrew Powell.
Desde ese momento, Alan y Powell realizarían trabajos para artistas como John Miles, Pilot, The Hollies y Al Stewart.
En solitario, Powell participa en los dos primeros álbumes de Kate Bush y en el álbum Power de Kansas.
Tras la creación de The Alan Parsons Project, gracias al talento de Eric Woolfson y el propio Alan Parsons, Powell realiza los trabajo orquestrales en el primer álbum de la banda Tales of mystery and imagination, y con especial énfasis, en el track The Fall of the House of Usher, donde despliega todo su potencial creativo.
Para el segundo álbum de The Alan Parsons Project, I Robot, Powell retorna con con el único tema que no fue escrito por la dupla Woolfson - Parsons en toda la carrera de The Alan Parsons Project, Total Eclipse, en cuyo trabajo (inspirado probablemente en la banda de sonido de 2001 Odisea del espacio) sintetiza en acordes violentos y coros casi caóticos, toda la trama del propio álbum.
A partir de ese entonces, Powell participa en todos los trabajos de The Alan Parsons Project, a excepción de Vulture Culture.
En 1983, Andrew realiza junto a la Orquesta Filarmónica de Londres, The Best of The Alan Parsons Project, homenajeando a la banda con excepcionales retoques filarmónicos de sus temas.
Para 1985 realiza la banda de sonido del film Ladyhawke, dirigida por Richard Donner, cuyo trabajo sonoro es producido por Alan Parsons y que contó con varios miembros de APP, entre los que destacaron Ian Bairnson, David Paton, Stuart Elliott, y Richard Cottle.
En 1994 se une nuevamente a Alan Parsons, tras la disolución de The Alan Parsons Project, para producir Try Anything Once y el surgimiento (junto a otros antiguos miembros de APP) de Alan Parsons Band y Alan Parsons Live Project, un proyecto que pretendió llevar la música de APP en conciertos en vivo, en Try Anything Once, Andrew Powell confirma su vocación de compositor, creando 4 de los temas del disco.
Más tarde, Powell realizó trabajos para Elaine Paige y The Hollies, continuando su relación con Alan Parsons en trabajos como On air y Time Machine, entre otros.
Aunque el nombre de Andrew Powell seguirá relacionándose indiscutiblemente al de Alan Parsons (en especial a su Proyecto) no deja de ser uno de los más prestigiosos músicos orquestrales contemporáneos, dotado de un excelente gusto musical y facilidad compositora, que lo llevó a trabajar con los más grandes artistas de géneros poco relacionados a su arte, lo cual lo transforma en un pionero camaleónico de la música, llevando lo más clásico del arte musical a los más populares expresionismos del rock y el pop.
Andrew trabajó en estudio para artistas del rock como Steve Harley & Cockney Rebel's (1973) donde le presentan al ingeniero de sonido Alan Parsons, de donde nace The Psychomodo, el primer trabajo realizado entre Alan Parsons y Andrew Powell.
Desde ese momento, Alan y Powell realizarían trabajos para artistas como John Miles, Pilot, The Hollies y Al Stewart.
En solitario, Powell participa en los dos primeros álbumes de Kate Bush y en el álbum Power de Kansas.
Tras la creación de The Alan Parsons Project, gracias al talento de Eric Woolfson y el propio Alan Parsons, Powell realiza los trabajo orquestrales en el primer álbum de la banda Tales of mystery and imagination, y con especial énfasis, en el track The Fall of the House of Usher, donde despliega todo su potencial creativo.
Para el segundo álbum de The Alan Parsons Project, I Robot, Powell retorna con con el único tema que no fue escrito por la dupla Woolfson - Parsons en toda la carrera de The Alan Parsons Project, Total Eclipse, en cuyo trabajo (inspirado probablemente en la banda de sonido de 2001 Odisea del espacio) sintetiza en acordes violentos y coros casi caóticos, toda la trama del propio álbum.
A partir de ese entonces, Powell participa en todos los trabajos de The Alan Parsons Project, a excepción de Vulture Culture.
En 1983, Andrew realiza junto a la Orquesta Filarmónica de Londres, The Best of The Alan Parsons Project, homenajeando a la banda con excepcionales retoques filarmónicos de sus temas.
Para 1985 realiza la banda de sonido del film Ladyhawke, dirigida por Richard Donner, cuyo trabajo sonoro es producido por Alan Parsons y que contó con varios miembros de APP, entre los que destacaron Ian Bairnson, David Paton, Stuart Elliott, y Richard Cottle.
En 1994 se une nuevamente a Alan Parsons, tras la disolución de The Alan Parsons Project, para producir Try Anything Once y el surgimiento (junto a otros antiguos miembros de APP) de Alan Parsons Band y Alan Parsons Live Project, un proyecto que pretendió llevar la música de APP en conciertos en vivo, en Try Anything Once, Andrew Powell confirma su vocación de compositor, creando 4 de los temas del disco.
Más tarde, Powell realizó trabajos para Elaine Paige y The Hollies, continuando su relación con Alan Parsons en trabajos como On air y Time Machine, entre otros.
Aunque el nombre de Andrew Powell seguirá relacionándose indiscutiblemente al de Alan Parsons (en especial a su Proyecto) no deja de ser uno de los más prestigiosos músicos orquestrales contemporáneos, dotado de un excelente gusto musical y facilidad compositora, que lo llevó a trabajar con los más grandes artistas de géneros poco relacionados a su arte, lo cual lo transforma en un pionero camaleónico de la música, llevando lo más clásico del arte musical a los más populares expresionismos del rock y el pop.